La vivienda se distribuye mediante la secuencia de una serie de espacios ininterrumpidos y se relacionan con una serie de anexos para cada uno de los espacios.
Le Corbusier explica esta pequeña vivienda unifamiliar siguiendo el modelo de la Maison Citrohan de la siguiente manera :
- “Máquina para vivir: a cada elemento le es asignado cierto número de metros cuadrados, en total 56 m2 para toda la casa. Se ordena y se llega a los 60 m2. En esta minúscula casa hay una ventana de 11 metros de largo y la zona de entrada ofrece una perspectiva de 14 metros de largo. Los tabiques móviles y las camas disimuladas permiten improvisar habitaciones para visitas”
Los tabiques que separan las estancias no llegan a tocar con el muro de la ventana, lo que consigue una continuidad de la ventana.
El lavabo que modela y se manifiesta en la fachada norte o la entrega de la bañera en el tabique dan mayor importancia a elementos generalmente secundarios y los convierte en actores principales.
Aparecen a su vez unos ventanales altos que favorecen la entrada de luz natural a través de ellos.
La casa reune tres de los cinco puntos de la nueva arquitectura como son; la terraza-jardín, la planta libre y las ventanas continuas. Empezando a aparecer el punto de techo jardín que están sin resolver del todo.
En estas imágenes vemos la separación de estancias sin la necesidad de usar los tabiques y las puertas para ello.
No hay comentarios:
Publicar un comentario